dissabte, 20 d’abril del 2013

NO ME AYUDES, POR FAVOR

Si me caigo por las nubes
no me ayudes.
Si me duele no lo dudes,
no me ayudes.
Si no caigo
no me dejes que me olvide 
de decirte que aún te quiero.

Sin embargo,
si aún me quieres,
no me dejes
que te deje que me ayudes,
cuando salto, cuando intento,
cuando fallo o cuando miento.

Porque es solo
ese pequeño invento
de vivir a cielo abierto
el que me hace seguir cuerdo
y pensar que aún hay secretos,
que todo está aún por descubrir
y es inocente y discreto
y que aún puedo confiar
en la gente o en el viento.

No me ayudes, por favor
que yo solo quiero vivir
y ver lo que es la vida
por ver si sirve pa' algo
por ver si sirvo pa' algo.

No me ayudes a arreglarlo,
no me ayudes a ser bueno,
no me ayudes con el fuego.
Ayúdame con tus nubes
que ayudan a tus campos de colores, 
ayúdame con tu risa
que ayuda a tus pulmones.

Ayúdame con tu presencia,
ayúdame con tu compañía, 
o solo ayúdame
a recordarme que me ayude, 
no sea que alguien venga a salvarme
por mi bien y el de la especie.

No me sirven las ayudas estatales
que mantienen la pobreza
ni las que me tiran bombas tan letales
por no perder la cabeza.

Ni las ayudas menudas
desinteresadas ayudas
favores a plazo fijo
con intereses compuestos
de los magos que ya saben
lo que es bueno.

Desconfío de los altos dignatarios
y más aún de los sectarios,
de los conformistas gregarios,
de los padres de la patria
y de los hijos del deber
que solo hacen lo que deben
por no saber lo que hacer.

De los que desfacen entuertos
al otro lado del mundo
por aplazar el presente
y te miran como a un bicho
por no ser del mismo frente.

De los que solo son coches,
aviones, mercancías,
luchando por intereses
de alguna compañía.

Personajes responsables
profesionales sin tacha
con raya en el pantalón,
pero sin vida privada.

Yo solo quiero un lugar donde no ayuden
porque no sea el miedo quien nos mueva
sino una nueva riqueza
que en cada día y momento amanezca
por estar vivo y queriendo,
que quiere decir escogiendo.

Por eso, si aún me quieres,
ayúdame solo con tus nubes
ayúdame con tu alegría,
o solo ayúdame
a recordarme que me ayude.

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